Voy a ser brutalmente honesto contigo, ni te amo, ni me amas; tampoco estoy enamorado con locura de ti, ni sientes libélulas tirando de tu ombligo cuando me miras; quizás tan solo nos necesitamos mutuamente y la vida nos ha puesto en contacto para saciarnos por un tiempo y al cabo, dejarnos ir. Quizá guardo bajo 7 llaves que mi corazón pertenece a alguien más y a ti te dañaron tanto que no te mueve la búsqueda del Amor verdadero y ahora te acomodas con placebos. Porque en esto de las relaciones hay quien te llena en lo emocional, pero no en lo sexual y al revés también. A veces la vida te da relaciones a medias para ver si te conformas y dejas de buscar, sin darte cuenta del truco caes en el gambito y lo aceptas como algo inevitable.
Te propongo quitarnos la incertidumbre de en medio y dejar el tablero a descubierto, así cuando esto se acabe podremos reconocernos que al menos nunca nos engañamos con espejos rotos y promesas vagas. Soy lo que en este momento necesitas, por esa razón y ninguna otra, he llegado ahora y no antes, ni después. Úsame sin misericordia para lo que el destino me puso en tu camino y déjame ir sin remordimientos cuando haya cumplido mi propósito en tu vida. Que haré lo mismo contigo, no tengas dudas de ello.
Por ahora solo necesito alguien con quien platicar y no romperme en el intento, ni siquiera busco tu cuerpo si acaso temes que esas sean mis intenciones, me siento solo y necesito de tu compañía para olvidar la razón de mi soledad, te necesito así, sin motivos escondidos ni compromisos a largo plazo. Y tú me necesitas también, porque te hace falta un amigo con quien desnudarte sin quitarte la ropa y ser más tú que la mujer que los demás quieren que seas. No puedo ser el mismo que era cuando una gran parte de mí se ha ido, pero tú puedes ser todo lo que no has sido con nadie, no te voy juzgar ni desaprobar por hacerlo.
Ahora hagamos un último acuerdo que sirva para hacer nuestro viaje ligero. No haré preguntas de cómo es tu vida lejos de mí y no pedirás explicaciones de lo que hago durante ese tiempo. Vamos a compartirnos solo lo que haga falta para satisfacer este intercambio de necesidades y respetar los límites que cada uno imponga al otro para evitarnos viajes incómodos y destinos lejanos.
Llévate la guía gratuita: «10 Errores típicos al iniciar una nueva relación».
Nuestra conexión es una especie de cruzada entre lo místico y espiritual con lo superficial y lo cotidiano, donde nuestras charlas se deslizan con naturalidad de lo sublime a lo profano, con silencios colados entre tu día a día y mi rutina, entre sorbos de café, el platillo del día y los tragos de chocolate o tinto al anochecer. Estamos ahí, entretejidos el uno para el otro, cómplices en el insomnio y los achaques de la edad, con el hilo tenue del presente que nos une y el pasado que nos separa.
Creo que la mejor manera de decirle a alguien que es especial en tu vida es compartirle tu música, es como decirle: ten, échale un vistazo a mi alma a ver si te gusta. En este momento, tú eres esa canción y agradezco que me permitas escucharte, tu presencia es todo lo que mi alma necesita para sanarse y soy también lo que le hacía falta a tu corazón para curarse. Somos el remedio más antiguo para lo que nos duele y la receta nos la extendió el curandero de mil nombres.
No llegaste tarde, tampoco antes de tiempo, lo hiciste cuando era nuestro mejor momento para encontrarnos, soy la mejor versión de mí mismo y lo eres de ti, es el motivo que veo para que el destino nos empujara uno hacia el otro, aceptemos sus designios y dejemos que nos escriba a su gusto, al fin y al cabo, ninguno de los dos tiene a alguien así con quien compartir esta parte de su camino y podría ser una de las mejores experiencias de nuestras vidas.
Germán Renko @ArkRenko
Psicólogo clínico y terapeuta de pareja.
Únete gratis a mi Telegram.
Te compartiré contenido e información de mi podcast, programa de radio y blog.
Recomendado:
Responder a “Me voy a morir”. | El rincón de mi concienciaCancelar respuesta