Las personas adultas no deberían iniciar una relación de pareja con alguien que aún no es un adulto independiente. Sin embargo, no está claro en qué consiste ser uno.

Ser un adulto independiente implica asumir responsabilidad total de tu vida y tomar decisiones que afectan tu bienestar sin depender completamente de otros. Aquí hay algunas características clave de ser un adulto independiente:

𝑨𝒖𝒕𝒐𝒔𝒖𝒇𝒊𝒄𝒊𝒆𝒏𝒄𝒊𝒂 𝒇𝒊𝒏𝒂𝒏𝒄𝒊𝒆𝒓𝒂: Puedes mantener tu propio estilo de vida, pagar tus gastos y manejar tus finanzas de manera responsable sin depender económicamente de tus padres u otros.

𝑻𝒐𝒎𝒂 𝒅𝒆 𝒅𝒆𝒄𝒊𝒔𝒊𝒐𝒏𝒆𝒔: Eres capaz de tomar decisiones informadas y asumir las consecuencias de tus elecciones. Esto abarca desde decisiones cotidianas hasta elecciones importantes en la vida.

𝑨𝒖𝒕𝒐𝒄𝒖𝒊𝒅𝒂𝒅𝒐: Eres responsable de tu propia salud y bienestar. Esto incluye cuidar tu salud física y emocional, programar exámenes médicos, y gestionar tus necesidades emocionales.

𝑽𝒊𝒗𝒊𝒆𝒏𝒅𝒂 𝒑𝒓𝒐𝒑𝒊𝒂: Puedes mantener tu propio espacio habitable y manejar todas las responsabilidades asociadas, como pagar alquiler o hipoteca, cuidar tu hogar y realizar tareas domésticas.

𝑹𝒆𝒍𝒂𝒄𝒊𝒐𝒏𝒆𝒔 𝒊𝒏𝒕𝒆𝒓𝒑𝒆𝒓𝒔𝒐𝒏𝒂𝒍𝒆𝒔: Puedes mantener relaciones saludables y equitativas con los demás. Esto incluye amigos, familiares y posiblemente una pareja. También puedes establecer límites y comunicarte de manera efectiva.

𝑪𝒂𝒓𝒓𝒆𝒓𝒂 𝒚 𝒆𝒎𝒑𝒍𝒆𝒐: Eres capaz de mantener un empleo o una carrera que satisfaga tus necesidades financieras y personales. Esto implica habilidades de networking, gestión del tiempo y desarrollo profesional.

𝑷𝒍𝒂𝒏𝒊𝒇𝒊𝒄𝒂𝒄𝒊𝒐́𝒏 𝒂 𝒍𝒂𝒓𝒈𝒐 𝒑𝒍𝒂𝒛𝒐: Puedes hacer planes a largo plazo para tu futuro, establecer metas y trabajar hacia ellas. Esto puede incluir metas profesionales, educativas, financieras y personales.

𝑹𝒆𝒔𝒊𝒍𝒊𝒆𝒏𝒄𝒊𝒂: Eres capaz de afrontar desafíos y superar obstáculos de manera independiente. La resiliencia implica adaptabilidad y la capacidad de aprender de las experiencias difíciles.

Ser un adulto independiente no significa necesariamente hacer todo por ti mismo todo el tiempo, ya que todos necesitamos apoyo en diferentes momentos de la vida. Sin embargo, implica tener la capacidad y la voluntad de tomar el control de tu propia vida y asumir la responsabilidad de tus acciones.

Llévate la guía gratuita: «10 Errores típicos al iniciar una nueva relación».

Iniciar una relación de pareja con alguien que no es un adulto independiente puede plantear varios desafíos y riesgos. Aquí hay algunos aspectos a considerar:

𝑫𝒆𝒑𝒆𝒏𝒅𝒆𝒏𝒄𝒊𝒂 𝒆𝒄𝒐𝒏𝒐́𝒎𝒊𝒄𝒂: Si tu pareja no es un adulto independiente financieramente, podrías encontrarte en una situación en la que tienes que asumir la carga financiera de la relación. Esto puede generar tensiones y desequilibrios en la relación.

𝑰𝒏𝒎𝒂𝒅𝒖𝒓𝒆𝒛 𝒆𝒎𝒐𝒄𝒊𝒐𝒏𝒂𝒍: La independencia financiera a menudo está vinculada con la madurez emocional. Si tu pareja no es independiente, es posible que también carezca de la madurez necesaria para manejar adecuadamente las tensiones y responsabilidades de una relación.

𝑷𝒓𝒆𝒔𝒊𝒐𝒏𝒆𝒔 𝒇𝒂𝒎𝒊𝒍𝒊𝒂𝒓𝒆𝒔: Las familias pueden tener opiniones y expectativas sobre las relaciones, especialmente si uno de los miembros no es independiente. Esto puede generar conflictos y estrés adicional en la relación.

𝑫𝒊𝒇𝒊𝒄𝒖𝒍𝒕𝒂𝒅𝒆𝒔 𝒆𝒏 𝒍𝒂 𝒕𝒐𝒎𝒂 𝒅𝒆 𝒅𝒆𝒄𝒊𝒔𝒊𝒐𝒏𝒆𝒔: Las personas que no son independientes a veces tienen dificultades para tomar decisiones importantes por sí mismas. Esto puede afectar la capacidad de la pareja para planificar y construir un futuro juntos.

𝑳𝒊𝒎𝒊𝒕𝒂𝒄𝒊𝒐𝒏𝒆𝒔 𝒆𝒏 𝒆𝒍 𝒄𝒓𝒆𝒄𝒊𝒎𝒊𝒆𝒏𝒕𝒐 𝒑𝒆𝒓𝒔𝒐𝒏𝒂𝒍: La independencia financiera y emocional a menudo va de la mano con el crecimiento personal. Si tu pareja no es independiente, podría tener dificultades para desarrollarse plenamente como individuo, lo que a su vez podría afectar la relación.

𝑫𝒆𝒔𝒊𝒈𝒖𝒂𝒍𝒅𝒂𝒅 𝒆𝒏 𝒆𝒍 𝒑𝒐𝒅𝒆𝒓: La falta de independencia puede crear una dinámica desigual en la relación, donde una parte tiene más control o poder que la otra. Esto puede conducir a tensiones y resentimientos a largo plazo.

𝑰𝒏𝒄𝒆𝒓𝒕𝒊𝒅𝒖𝒎𝒃𝒓𝒆 𝒔𝒐𝒃𝒓𝒆 𝒆𝒍 𝒇𝒖𝒕𝒖𝒓𝒐: La falta de independencia puede generar incertidumbre sobre el futuro de la relación. Preguntas sobre la capacidad de la pareja para contribuir al hogar o manejar responsabilidades a largo plazo pueden surgir y afectar la estabilidad emocional de la relación.

En última instancia, cada relación es única y las circunstancias individuales varían. Es importante comunicarse abierta y honestamente con tu pareja sobre estos temas y asegurarse de que ambos estén en la misma página en cuanto a expectativas, metas y responsabilidades en la relación.

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¡Saludos y hasta la próxima!

Germán Renko @ArkRenko
Psicólogo y terapeuta de pareja.

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5 respuestas a “¿Te consideras un adulto independiente?”

  1. Como siempre muy asertivo y muy claro, gracias por toda información que nos brindas.🤗

  2. Gracias por dejarme entrar a tu espacio, siempre te he seguido.
    Saludos

  3. Me encanta leerte. Carolina Rivera

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